Modelos de comunicación con pacientes difíciles

El psicólogo estadounidense Robert Witch identificó cuatro modelos principales de comunicación con los pacientes: pastoral, ingenieril, contractual y colegial. ¿Cómo funcionan estos modelos de interacción, cuáles son sus diferencias, ventajas y desventajas? Hoy analizaremos los enfoques de comunicación con cualquier paciente, incluso con el más difícil.
Competencias comunicativas del médico
En el pasado, la autoridad del médico era incuestionable. El paciente obedecía sin dudar y, por lo general, seguía las indicaciones. Hoy en día, una orden directa como “debes hacer solo lo que yo digo” puede asustar o enfurecer al paciente en lugar de motivarlo a seguir las recomendaciones. Sin embargo, nunca es tarde para cambiar, y un médico moderno tiene la capacidad de no lamentarse por el pasado, sino de repensar su modelo de comunicación con el paciente.
Dependiendo de la conciencia, el compromiso y el nivel de responsabilidad del paciente, se distinguen cuatro modelos de interacción.
Modelo pastoral
Este modelo, históricamente establecido y el más utilizado (75% de los casos), está relacionado con una baja conciencia y baja responsabilidad por parte del paciente. Este modelo puede caracterizarse por frases del paciente como: “no depende de mí, todo está en sus manos, doctor”, “¿qué puedo hacer yo?” o “usted sabe mejor”. Si utilizamos la frase “debe” en relación con el paciente, significa que se está utilizando el modelo pastoral. En este modelo, el médico está inherentemente por encima del paciente, toda la responsabilidad recae sobre el médico y no hay colaboración.
Modelo colegial
Se utiliza en el 10% de los casos. Implica comunicación en igualdad de condiciones y se caracteriza por una alta conciencia y alta responsabilidad por parte del paciente. Este modelo de interacción es posible con un paciente que está informado sobre su enfermedad, lee mucho y trata de entender las causas. La frase clave que caracteriza este modelo de comunicación es: “discutamos esto juntos”.
Este modelo permite discutir con el paciente los pronósticos de tratamiento, dividiendo las probabilidades en varios escenarios. Por ejemplo, qué sucederá si sigue el tratamiento y qué sucederá si espera. Y se le ofrece al paciente hacer una elección consciente. Al mismo tiempo, el médico presenta los resultados probables no para asustar, sino para mostrar caminos reales de desarrollo. El paciente siente que también es responsable de su elección y sigue más de cerca las recomendaciones.
Modelo ingenieril
Se encuentra en el 5% de los casos. Es igualmente ineficaz que el modelo pastoral. Está relacionado con una baja conciencia y baja responsabilidad del paciente. Este modelo es especialmente común entre los especialistas quirúrgicos, donde después de un procedimiento, manipulación o intervención quirúrgica, el médico considera que su trabajo ha terminado. El paciente necesita obtener explicaciones y recomendaciones para la rehabilitación para prevenir complicaciones, pero se siente como un conejillo de Indias: no entiende el sentido de la intervención ni los objetivos del tratamiento, no está involucrado y no está satisfecho.
Este modelo solo tiene éxito si el paciente está inconsciente y excluido del proceso de tratamiento por razones objetivas. En todos los demás casos, este modelo no tiene éxito, ya que el paciente no participa en su tratamiento.
Modelo contractual
Se encuentra en el 10% de los casos y está relacionado con una alta conciencia y responsabilidad. Implica un cierto acuerdo entre el paciente y el médico, donde el médico le hace entender al paciente que no es omnipotente. “No puedo hacerlo todo por ti. Nuestra interacción es un trabajo en pareja. Como médico, puedo diagnosticar, elegir los mejores medios y métodos de los disponibles, puedo explicar cómo funcionan y cómo utilizarlos de la mejor manera, puedo evaluar la corrección del tratamiento. Pero ahí termina mi papel, y todo lo demás depende solo de ti: si seguirás mis consejos y recomendaciones y en qué medida lo harás. A partir de ahí, todo está en tu responsabilidad.” Este modelo permite dotar al paciente de responsabilidad sobre el resultado del tratamiento y motivarlo.
Consecuencias del uso de diferentes modelos de comunicación
En el caso de los modelos directivos (pastoral e ingenieril), la comunicación con el médico se percibe como presión, lo que puede provocar miedo o agresión en el paciente. La dominancia del médico fomenta un comportamiento infantil incluso en el paciente más adulto (obediente o caprichoso). El paciente transfiere la responsabilidad del resultado del tratamiento al médico, y si el resultado no cumple con sus expectativas, puede presentar quejas y demandas judiciales.
En el caso de la comunicación en igualdad de condiciones (modelos contractual y colegial), el ambiente emocional es tranquilo y no hay presión. El paciente siente responsabilidad y está motivado. Respeta al médico, confía en él y siente respeto por sí mismo, ya que recibe respuestas a todas sus preguntas. La comunicación en igualdad de condiciones ayuda a reducir el riesgo de agotamiento del médico.
Frases de ayuda
Utiliza estas frases para llegar a un acuerdo con el paciente y orientarlo hacia un tratamiento efectivo:
- Este medicamento es necesario para...
- El mecanismo de acción del medicamento es...
- Esto no solo es necesario para que te sientas mejor ahora, sino también para asegurar tu bienestar en el futuro.
- ¿Estás listo para...?
- ¿Estás de acuerdo en que...?
- Estoy dispuesto a ayudarte a encontrar lo mejor y más adecuado...
- A partir de ahora, todo está en tus manos.
- Puedes encontrar información sobre tu enfermedad y cómo actuar en...
Información al paciente
Desarrolla un algoritmo para informar a tu paciente y acordar los objetivos del tratamiento, involucrándolo en el proceso de curación. Es importante incluir en el algoritmo puntos como la gravedad de la enfermedad, las características de su evolución y el pronóstico. También presta atención al mecanismo de acción de los medicamentos prescritos y la responsabilidad del paciente en seguir el tratamiento. Explica al paciente las reglas de acción en diferentes situaciones y cómo buscar información útil en recursos confiables.
Solo una interacción equitativa puede crear un ambiente favorable para la consulta, haciendo que la comunicación con el paciente sea constructiva y aumentando la efectividad del tratamiento.